Primera norma internacional para el Internet de las Cosas

La ISO (Organización Internacional de Normalización) ya publicó la primera norma para estandarizar la arquitectura del Internet de las Cosas. Consiste en regular mundialmente de manera uniforme un vocabulario común y diseños reutilizables.

Implica mejores prácticas para garantizar la seguridad y un fundamento tecnológico con medidas robustas. Esto mejoraría considerablemente la confianza en el sector.

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La UNE (Asociación Española de Normalización) emitió un comunicado con este estándar. El ISO/IEC 30141 Internet de las Cosas (IoT) es una Arquitectura de Referencia que otorga una base común para diseñadores.

También se beneficiarán los desarrolladores de aplicaciones IoT, que podrán desplegar sistemas confiables, resguardados a seguro. Claramente al margen de la privacidad y perfectamente capaces de responder ante las adversidades. Como lo representan los ciberataques y las interrupciones por las catástrofes naturales.

Los directivos de la UNE subraya que la IoT está en todas partes porque integra un sinfín de objetos cotidianos. Actualmente existen muchos procedimientos informáticos que interactúan sin necesidad de la intervención humana, ejemplo de ello son:

• La agricultura de precisión,
• La fabricación y ensamblaje inteligente,
• Los mecanismos de sanidad electrónica.

Partiendo de este punto, nada parece frenar el auge de las ciudades inteligentes.

El estándar ISO/IEC 30141 para el Internet de las cosas

Este estándar ha sido desarrollado bajo la supervisión de la ISO y la Comisión Electrónica Internacional conformando un comité técnico. El ISO/IEC JTC 1 para Tecnología de la información desplegado en el subcomité SC 41. Respecto al IoT y sus tecnologías relacionadas.

Este primer estándar evidentemente demuestra que la regularización contribuye al progreso eficaz de la digitalización. Cabe señalar, que existen por revisar más de 600 normas para garantizar la correcta funcionalidad de la industria 4.0. Enfocados en:

• Interoperabilidad,
• Ciberseguridad,
• Robótica avanzada,
• Conectividad, e
• Impresión 3D.

En cuanto a la región, en España ya se ha publicado la Especificación UNE 0060 Industria 4.0. Es un sistema para la administración que favorece la digitalización. Además, se incluirán futuras normas tales como las que se aplicarán para la gestión energética en la industria. También para los censores para los medidores de gas que son inalámbricos.

La IoT de Sigfox alcanza más de mil millones de personas

Con la incorporación de Honduras, Kenia, Noruega, Austria, Guatemala, Liechtenstein, Perú y Rumanía ya son 53 países disponen del servicio. En España abarca ya el 95% de los ciudadanos.

Con razón la compañía declara que es la red global más amplia hasta el momento. Es un récord apreciable, considerando que su primera antena fue desplegada solo hace 5 años. Y no ha parado de crecer desde la fecha de una forma vertiginosa y cubre el 90% del PIB mundial.

No solo es amplia, sino también segura, confiable y sencilla de usar por lo que es compatible con los sistemas más básicos. Cubre los centros estratégicos principales como aeropuertos y estaciones de tren. Esto apertura las oportunidades sobre la logística y las diferentes cadenas de suministro.

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Desde el principio se proyectó que una red global basado en mensajes revolucionará el mundo. Por lo que el actual crecimiento de mil millones de usuarios encamina a la evolución. Subraya Ludovic Le Moan el cofundador y consejero de Sigfox.

Esta tecnología ayuda a los clientes a transformar profundamente sus negocios. Y la apuesta es hacia el desarrollo de innovaciones que marcarán el inicio de la cuarta revolución industrial.

Datos curiosos

La IoT es un sistema de medios de computación relacionados entre sí. Puede tratarse de máquinas digitales y mecánicas; incluso personas o animales con identificadores. Con capacidad de transferir datos de una red, sin la intervención humana.

Por citar un ejemplo de la aplicación del IoT podría aplicarse a una infinidad de productos. Tales como libros, lámparas, termostatos y refrigeradores.

Si los repuestos automotrices, el sistema de paquetería y los botiquines fueran conectados a internet… no tendríamos productos ni medicinas caducadas.

También conoceríamos con exactitud su distribución mundial, y donde es más necesario. Ya no extraviaríamos las llaves y conoceríamos con exactitud el estado de mantenimiento de nuestro hogar y vehículo.

La teoría explica que la IoT debería codificar de 50 a cien millones de objetos para darles seguimiento. En promedio un ser humano está rodeado por unos mil a cinco mil objetos. La empresa Gartner estima que habrá 26 mil millones de dispositivos conectados a internet para el 2020.